Quién es esencial... Usted

No cabe duda de que, en estos momentos críticos, ha sido absolutamente oportuno reconocer el duro trabajo realizado por tantas personas maravillosas en el sector de la asistencia, en el sector del transporte, en el sector educativo, en el sector de la alimentación y las bebidas, y en muchos más. Gracias a todos los que han trabajado incansablemente en estos tiempos difíciles.

Gracias también a TODOS LOS DEMÁS. A los que han adaptado sus hábitos de trabajo a un despacho escondido en el dormitorio para que no se oiga a los niños durante una reunión. A los que habéis pasado de proyectos multitarea en el trabajo a megatareas en el trabajo, además de convertiros en ayudantes de enseñanza, apoyo técnico, cocinera y limpiadora, además de ser un apoyo emocional para vuestros hijos recién escolarizados en casa. Aquellos de vosotros que habéis tenido que soportar pérdidas en el empleo o que os habéis enfrentado a circunstancias familiares difíciles, y aun así perseveráis para encontrar la manera de mantener la normalidad, mantener unida a vuestra familia y recuperar la estabilidad financiera. Aquellos de ustedes cuya familia era su comunidad y han tenido que encontrar nuevas formas de reunirse o incluso ponerlas en pausa. Aquellos de vosotros que estabais a punto de iniciar un nuevo camino en la universidad o un trabajo o una relación que puede que os hayan arrebatado, al menos en el formato que conocíais. Puede que no figuréis en una página web gubernamental, pero sabed que todos sois imprescindibles.

En décadas venideras, cuando la historia reflexione sobre esta época de miedo y confusión, un niño oirá la historia de cómo su abuelo perdió su trabajo, pero se mantuvo fuerte y decidido a cuidar de sus hijos, uno de los cuales es la madre de este niño; ella recordaba lo maravilloso que era pasar tiempo con sus padres y cómo celebraban juntos la vuelta a la normalidad con el trabajo regular y ocasiones especiales familiares, como unas vacaciones en el extranjero.

En las próximas décadas, una joven estudiante de enfermería recordará en su primera entrevista de trabajo que la razón por la que eligió ser enfermera es porque su abuela trabajó incansablemente para ayudar a cuidar a los pacientes pobres durante ese tiempo. En las próximas décadas, alguien abrirá un nuevo servicio de reparto de comida a domicilio centrado en las personas que tienen dificultades con las nuevas tecnologías, inspirado por las historias de su padre, que estaba todo el día repartiendo comida por todo el país y, sin embargo, siempre se acordaba de ayudar a la vecina anciana de la calle de abajo que no tenía internet y no podía ir a la tienda por su cuenta.

En las próximas décadas, un estudiante universitario se inspirará en una profesora que tuvo que interrumpir sus estudios, pero que no renunció a su sueño académico. En décadas venideras, un grupo de amigos se reirá de las formas que encontraron para mantener su amistad sin fiestas, pubs ni restaurantes.

En décadas venideras, será su historia -de adaptación a nuevas realidades, de creación de nuevas empresas, de apoyo a los vecinos, de encontrar nuevas formas de estar cerca de la familia y los amigos que estaban lejos, de encontrar nuevas formas de entablar nuevas amistades, de sonreír con los ojos para que los extraños reconozcan la calidez y la amabilidad y de perseverar a lo largo de esta época de miedo- la que traerá el retorno de la compasión humana y la inspiración y la aspiración de la generación más joven a darse cuenta de nuevas formas de compartir que se preocupan por su comunidad.