Falta de confianza en el lugar de trabajo.

El reto

Mi clienta acudió a mí porque tenía problemas de confianza en el trabajo. Lleva más de 20 años trabajando en su puesto actual y ocupa un cargo de bastante responsabilidad. Me dijo que parece segura de sí misma, pero que en el fondo sufre una gran falta de confianza y ansiedad ante las diversas situaciones laborales, como reuniones, hablar en público y dirigir un equipo de asistentes personales.

El efecto

Antes de una reunión, mi clienta se ponía roja, sudaba mucho y se le trababa la lengua. No hablaba, aunque me había dicho que sabía de lo que hablaba porque llevaba más de 20 años en la empresa. Se quedaba sentada en la reunión preocupada por los demás y por lo que pensarían de ella si hablaba y creía que pensarían que era tonta y que no sabía lo que estaba haciendo.

Solución

A continuación, dedicamos un tiempo a realizar un par de ejercicios que le ayudarían a mantener su confianza y asertividad en las próximas reuniones. Fijamos un momento de su vida en el que se sentía especialmente segura y asertiva y, a continuación, dedicamos un tiempo a realizar un ejercicio llamado el Círculo de la Excelencia, que le encantó y le resultó fácil de poner en práctica.decidió que lo interpretaría como una capa que se pondría al entrar en la reunión. También trabajamos con el ejercicio de giro para la ansiedad, que le resultó muy útil, sobre todo antes de las reuniones. También hablé con mi clienta sobre sus creencias actuales y le expliqué que no tenía pruebas de que esas creencias le impidieran hablar en público o en reuniones. Su respuesta inicial fue maravillosa.

Resultado

Esto es lo que me dijo: "Dios mío, qué decir de mi reunión de hoy en el trabajo. Utilizando la técnica de la que hablamos el martes, todo salió de maravilla. Desde el momento en que empezó la reunión, prácticamente la presidí, ya que mi jefe no se sentía muy bien. Me mostré firme y segura de mí misma, hablé cuando sentí que debía hacerlo y no estaba tan nerviosa ni estresada como de costumbre. La reunión de hoy ha sido muy positiva y con sólo añadir ese pequeño y sencillo ejercicio mi confianza ha aumentado muchísimo. Estoy entusiasmada. Gracias por nuestra última sesión, estoy deseando que llegue la próxima.

Mi cliente ahora pasa un poco más de tiempo antes de las reuniones respirando, conectándose a la tierra y tomándose un poco más de tiempo para prepararse en lugar de no tener tiempo y entrar en pánico. Ahora lleva su capa en las reuniones y lo ha hecho unas cuantas veces desde nuestro primer par de sesiones. El impacto ha sido fenomenal y ahora ya no teme a las reuniones.