De sentirse deprimido, luchando día a día, a sentirse capaz, seguro de sí mismo y hacer mucho más.

Una estudiante de 18 años superó la ansiedad, la depresión, el TEPT y el discurso negativo. Volvió a ser capaz, confiada y capaz de montar en bicicleta.

De sentirse deprimido, luchando día a día, a sentirse capaz, seguro de sí mismo y hacer mucho más.

Publicado por Yvonne Fernando en

El reto

Este estudio de caso ha sido redactado junto con mi cliente y con su aprobación. Para proteger su confidencialidad, me referiré a mi cliente como J.

J, una estudiante de 18 años, sufría ansiedad y una ligera depresión. Le costaba hacer las cosas normales del día a día. También sufría un trastorno de estrés postraumático por un accidente de bicicleta con un coche.

Antes de venir a verme, había probado con tres consejeros diferentes, TCC, un curso de salud mental de 6 semanas y le habían recetado medicación.

El efecto

J no podía hacer todo lo que le hubiera gustado. Cosas tan sencillas como levantarse o lavarse el pelo eran una verdadera tarea e ir al colegio se le hacía mucho más difícil.

Se sentía muy deprimida y, como consecuencia de no poder hacer nada, tenía muy mala opinión de sí misma. No sabía cómo llegar a un punto en el que la vida volviera a ser más fácil y factible.

Como consecuencia del accidente de bicicleta, no le gustaba pasear alrededor de los coches, no podía ir en bicicleta y se ponía a llorar si se sentaba en el asiento delantero de un coche y necesitaba una distracción si iba en el trasero. A J le habían dicho que tendría que aprender a vivir con ello y evitar provocar esos sentimientos. Pero J sentía que necesitaba hablar de ello y de las cosas traumáticas e incómodas y controlarlo.

Cuando vino a verme estaba muy desplomada. Le dolía sentarse erguida. Sentía que le habían quitado parte de su identidad. Había hecho 8-9 años de ballet y ahora creía que su postura siempre sería mala.

Solución

Empezamos a ver cómo quería ser J y qué quería ella y le expliqué lo que estaba pasando con el TEPT y cómo podíamos cambiarlo. Creé un espacio para que hablara de las cosas a su propio ritmo y trabajamos con ellas cuando estaba preparada. J dice que enseguida se dio cuenta de que funcionaba y que no necesitaba saber por qué.

La relación entre nosotras era buena y eso la ayudó a ser sincera y a decir lo que se le pasaba por la cabeza, independientemente de lo que yo pensara. J también disfrutó mucho de la presencia de mi perro, que le ayudó a darse cuenta de lo que quería decir y sentir... le ayudó a darse cuenta de las cosas.

Las sesiones se desarrollaron de forma conversacional y utilizando diferentes técnicas de PNL y coaching. Como J era muy visual, trabajamos con diferentes ejercicios de visualización y un ejercicio de PNL que cambió su recuerdo del accidente y la visualizó saliendo en bici de nuevo. También le di cosas para que escribiera en su diario como deberes.

También cambiamos su lenguaje negativo por uno positivo. J dice que eso le ayudó mucho.

Resultado

J dejó la medicación poco después de unas cuantas sesiones.

Ahora medita y pedalea todos los días. Antes le habrían entrado ganas de llorar sólo con ver un coche. Ahora vuelve a tener una buena postura y puede sentarse erguida.

Ahora es capaz de controlarse a sí misma y sus sentimientos, tiene más conciencia y da prioridad a buenos hábitos como la meditación, la gratitud y hacer algo creativo, que ha descubierto que es necesario para ella. También está mejorando a la hora de poner límites en casa.

J utiliza un lenguaje positivo y es más honesta con su estado de ánimo y se siente lo suficientemente cómoda como para afrontar sentimientos incómodos si surgen. Ahora es más inquisitiva que miedosa.

J dice que el trabajo que hicimos tuvo un impacto enorme y positivo en ella. Puede hacer mucho más, es más capaz y tiene más confianza en sí misma. Ha sido muy poderoso. Había reprimido muchas cosas y ahora puede expresarse. Fue duro durante un tiempo, pero estaba preparada para la transformación. Ahora está logrando más de lo que se había propuesto... y más de lo que nunca había esperado.

Con COVID que realmente ha sido probado; ella ha sido grande y ha sido capaz de hacer frente a las cosas que necesitaba.

Yvonne Fernando
Yvonne Fernando

Yvonne Fernando es una Master Practitioner certificada en PNL y Life Coach que trabaja con adultos, niños y organizaciones para ayudarles a realizar cambios positivos.